El 5G, la nueva evolución de las redes móviles, está a la vuelta de la esquina. Si bien, la agencia de rating Moody’s estima que no tendrá un impacto directo en Europa hasta 2025 y en Uruguay hasta el 2030. Esto significa que el sector asegurador Uruguayo tiene margen para prepararse ante la revolución que se avecina ya que, según señala la agencia en un informe reciente, “el 5G marcará el comienzo de las tecnologías disruptivas del internet de las cosas“.  

Por tanto, el seguro tiene unos 10 años para adaptarse a los cambios que traerán las casas inteligentes y los coches autónomos. Moody’s apuesta a que estos avances reducirán los siniestros y, por ende, se acabarán rebajando las primas en ramos como Autos y Hogar.

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